17 OTRA VEZ

Titulo Original: "17 Again"
Dirigida por Burr Steers
Con Zac Efron, Leslie Mann, Thomas Lennon, Matthew Perry.
Despues de mi "experimentación" con cine indio, israeli y sueco, merecía esta pequeña "vuelta a la normalidad" con una comedia de toques románticos y familiares sin muchas pretensiones, pero en la que se nos plantea un tema en el que seguramente muchos hemos pensado desde que tenemos lejos los 17 años cumplidos. Qué haríamos si volvieramos a tenerlos. La respuesta más común a este profundo debte suele ser que no renunciariamos a la experiencia adquirida, pero haríamos muchas cosas distintas.
En esta historia, Zac Efron, a quien algunos recordarán por el telefilm High School Musical, donde podíamos admirar sus dotes para el canto y el baile, interpreta a un personaje que con 17 años se ve obligado a sacrificar su carrera universitaria y de baloncesto por su paternidad. Luego, 20 años más tarde (de mayor el personaje lo interpreta Matthew Perry, más conocido por Friends), la vida le pasa mucha factura y él culpa a sus decisiones de aquel entonces. Pero un conserje mágico y "místico" le brinda la posibilidad de repetir de nuevo su vida desde los 17.
Entonces, nuestro héroe comprueba que realmente no se trata de rehacer sus decisiones cambiándolas por otras, sino más bien de arreglar todo aquello que ignoraba que fuera mal en el presente. Esencialmente los asuntos de sus hijos, que dada su nueva apariencia se convierten en compañeros de instituto. El resto de la película se resuelve de forma muy agradable en torno a esta trama.
En algunas escenas es una gozada escuchar a un diecisieteañero dar sermones en clase como si de un padre experimentado se tratase, o dar pasos de baile con la que se supone que es su mujer pero lo ignora. Por momentos, el compañero de piso, o más bien anfitrión, y antiguo amigo inseparable del instituto de nuestro "prota", roba el show con momentos muy frikis, como esa cama de Star Wars o sus espadas laser, y su cómica conquista de la directora del instituto.
Lo que queda es un buen sabor de boca y la sensación de no haber visto nada nuevo, pero sí muy agradable, para pasar un buen rato.